Busco las palabras
y lo único que encuentro
son borbotones de esperanza.
Hay algo mas allá
que aun no alcanzo a vislumbrar
de la saliva desgastada
de aquellos que enmudecen mis instintos.
No son ellos a los que oigo hablar,
ni tan solo sus miedos son suyos...
Abro la puerta a una nueva realidad,
y encuentro a un alma liberada,
las cadenas del sistema
no me tienen amarrada,
Navego..
aunque soy un ego con patas.
Yayo decía:
"los miedos si los pones del revés...
se vuelven alegrías
Y que con solo un silbido,
(o un chasquido)
uno cambia la perspectiva."
Hoy,
mi oda se la dedico
a mi alma que me honra.
Soy un volcán de luceros...
Soy el sueño de las amapolas
Somos la libertad y el amor que nos atesoran